Ponga en pausa La Haine en cualquier momento y el cuadro que le devuelve la mirada parecerá digno de estar colgado en un museo.
Nota completa a Steve Savale de Asian Dub Foundation por Jade Wickes en The Face Mag
Este clásico rebelde y frío, que cumple 30 años este año, fue el segundo largometraje del director Mathieu Kassovitz; sigue a los amigos Saïd, Vinz y Hubert mientras acechan los suburbios parisinos, tambaleándose por los efectos de la brutalidad policial en su puerta.
Cuando se estrenó en 1995, causó una gran conmoción en Francia: el entonces presidente Jacques Chirac escribió una carta personal a Kassovitz y el entonces primer ministro Alain Juppé organizó una proyección de la película para funcionarios del gobierno, destacando las banlieues como espacios liminales para aquellos que la sociedad ha olvidado.
No tomé ninguna fotografía durante la proyección y la actuación en Southbank (tengo respeto por mí mismo), aunque me senté con Steve Savale de Asian Dub Foundation para preguntarle cómo creó un acompañamiento tan mágico para una película tan atemporal.
En los años siguientes, La Haine ha adoptado diferentes formas: en octubre, Kassovitz la adaptó para un musical. El domingo, el Southbank Centre la proyectó junto con una interpretación especial en vivo de la banda sonora a cargo de Asian Dub Foundation , que solo hizo que la ira y la energía proféticas de La Haine irradiaran aún más. Siempre recordé lo hermosa que se veía la película, pero al volverla a ver recordé lo divertida que era y lo trágico que fue que tan poco haya cambiado desde su estreno.
